Noticias

Adaptación entre micrófono y preamplificador

2025-05-29
  En aplicaciones de micrófonos y preamplificadores, la "adaptación de impedancia (Impedance Matching)" es un tema ampliamente malinterpretado. De hecho, la mayoría de micrófonos y preamplificadores funcionan satisfactoriamente sin una adaptación de impedancia "verdadera". La adaptación solo es relevante al buscar una calidad sonora, tonalidad, coloración (coloration) o características específicas.
  Antes de profundizar, definamos impedancia. Todo micrófono tiene impedancia de salida, y todo preamplificador tiene impedancia de entrada. La "impedancia" es la resistencia que encuentra la señal al fluir del circuito del micrófono al del preamplificador.
  Como la impedancia se denota con "Z", surge el término "Hi-Z (alta impedancia)" (familiar para guitarristas). La impedancia de entrada del preamplificador afecta significativamente el sonido, ya que la interacción entre la impedancia de salida del micrófono y la de entrada del preamplificador altera el resultado final (ej: ecualización diferente, características de ataque). Además, esta interacción varía según combinaciones específicas.
  Analógicamente: El micrófono es como una tubería (baja impedancia, baja resistencia al flujo), y el preamplificador es una boquilla (alta impedancia). Si cerramos la boquilla (impedancia de entrada → ∞), la presión (voltaje) alcanza su máximo y el flujo (corriente) es 0.
  Al abrir ligeramente la boquilla, la resistencia y presión disminuyen (aunque siguen altas), aparece flujo, pero con "silbido" (altas frecuencias). Al abrir más, resistencia y presión caen, el flujo aumenta y el silbido desaparece. Así, menor impedancia del preamplificador atenúa más las altas frecuencias.
  Igualar impedancias de micrófono y preamplificador es un error: reduce nivel de señal y relación señal/ruido en 6dB. Para micrófonos dinámicos y de condensador, la impedancia de entrada óptima del preamplificador debe ser ~10 veces la impedancia de salida del micrófono. Preamplificadores modernos con impedancia ajustable (ej: Focusrite ISA 428, Summit 2BA-221) permiten flexibilidad: su transformador y grado de interacción con la impedancia del micrófono son ajustables, produciendo variados efectos de "coloración" mediante ecualización implícita.
  Su ventaja clave: Permiten ajustar contenido frecuencial durante grabación sin ecualizadores externos, evitando ruido y pérdida de señal por exceso de dispositivos. Además de la regla 10:1, permiten experimentar con configuraciones de impedancia sin dañar equipos hasta lograr el sonido deseado.